Concédeme, Jesús, la sed
Concédeme, Jesús, la sed
De conocer Tu santa ley;
Infunde en mí la luz
De tu perfecta salvación,
Y gozará mi corazón
De amor la plenitud.
Otórgame, Señor, poder
Y gracia para comprender
Que a todos debo amar;
Concédeme por Tu bondad
Del cielo la felicidad
Aun aquí gozar.
¡Oh!, santifícame, Señor,
Y llena mi alma de Tu amor;
Permíteme el oír
Tu voz, tu rostro contemplar,
Y tu hermosura admirar,
Y en Ti, y por Ti, vivir. Amén.
Por que no debemos celebrar a Halloween
En este libro, exploramos los origenes de Halloween y el Día de los Muertos. Examinamos de donde vino estas tradiciones. También examinamos muchos o casi todos los iconos como brujas, momias, zombies, vampiros, etc. y explicamos como estos iconos van en contra de lo que la Biblia enseña, Dios ha puesto una vez la muerta y después de esto, el juicio de cada uno. No hay que regresarse después de la muerte. descarga.